Cuando dimos el paso hace cuatro años, heredamos un club roto: sin rumbo, sin estructura, con deudas, con un equipo al borde del descenso y una grada que había perdido la ilusión. Nos prometimos entonces que si algo nos movía no serían los títulos, ni los egos. Lo que nos movía —y nos sigue moviendo— era la idea de reconstruir el Sporting de Alcázar CF desde la humildad, desde el orgullo y desde el corazón.
Hoy miro atrás, y me cuesta creer todo lo que hemos conseguido.
Hemos devuelto al equipo la dignidad competitiva, peleando por el playoff hasta el último minuto.
Hemos traído de vuelta a los mejores jugadores de Alcázar, formados en nuestra cantera, recuperando esa identidad que nunca debió perderse.
Hemos abierto las puertas del primer equipo a quien ha querido pelear por ganarse su sitio, creando algo que muy pocos clubes pueden decir: más del 80% de la plantilla es “de la casa”.
Hemos duplicado el presupuesto con esfuerzo, confianza y la ayuda de patrocinadores que no han fallado.
Y lo más importante: hemos vuelto a llenar el Delgado Meco. Niños en el césped, familias en la grada, domingos con más de mil personas empujando. Hemos recuperado esa chispa que hace grande a un club modesto: su gente.
Confieso que mi intención era dar un paso al lado. Que otra persona cogiera el relevo. Porque esto desgasta, consume, y deja huella. Pero también te enseña el valor de lo construido. Y cuando vi que no se presentaba nadie, supe que no podía dejar caer lo que tantos hemos levantado con tanto sacrificio.
Por eso, por responsabilidad, por respeto a todos los que creen en este proyecto y por el amor que le tengo a este club y a mi ciudad, he decidido volver a presentarme. Pero no lo hago con ambición personal, sino con la voluntad de mantener viva esta llama un poco más, hasta que alguien venga a coger el testigo de un club sano, limpio y sostenible.
Nuestra continuidad será año a año. Sin ataduras. Sin personalismos. Solo por el compromiso con lo que creemos: que el fútbol regional tiene futuro si se cree en la cantera, en la honestidad y en las personas.
Gracias a quienes estáis, a quienes ayudáis en la sombra, a quienes llenáis las gradas, a quienes creéis que aún se puede. Este club es vuestro. Y mientras pueda, seguiré dejándome la piel por él.
Con toda mi gratitud,
Jesús Villajos Brunner
Presidente Sporting de Alcázar CF.